Pequeña, pequeña, pequeña... ¿Qué puedo decirte para empezar con esto? ¿Que te dedico otro post de mi blog cuando ya te he dedicado unos cuantos haciendo referencia a otros 30 días juntos o a eventos futuros?
Sé que no te es fácil soportar lo que soportás siempre y aunque digas que estás acostumbrada, no lo estás. Sé que no es fácil en esa cabecita aceptar que los 14 se hicieron 15 y los 15 se van a hacer 16... y así sucesivamente, dejándote cada vez más grande, con más obligaciones, más cosas que soportar y saber que llega el tiempo de un pequeño cambio. Sé mejor que nadie lo que te cuesta soportar todas esas injusticias que te tocan vivir y que no es para nada fácil convivir con eso...
Pero acá viene mi consejito: si la vida te cachetea, poné la otra mejilla e incitala a que te siga cacheteando. Dejá pasar todo, pero a la vez no lo hagas. No te hagas problemas por cosas; si se soluciona, ¿para qué preocuparse? Y si no se soluciona, ¿para qué también preocuparse? Viví tus 15, viví tus 16, viví tu vida sin dejar que te la amarguen, aceptando la autoridad con un "si" pero a la vez abriendo la boca cada vez que te quieran callar. Hablá, opiná, comentá, aceptá, quejate, pero nunca grites para hacerte escuchar, porque eso no te va a llevar a nada. Quejate por dentro más no por fuera: no sirve de nada lamentarse por cosas que pasan o no pasan. Aunque tu curso esté plagado de gente careta que no le interesás y solo te usan cuando les conviene, no les des cabida pero tampoco los dejes de lado. Sé vengativa: devolvé el mismo trato que a vos te dan, pero a la vez intentá no vengarte porque no está bien. Y por más que te pelees con todos y te quedes sola en medio de la calle en un invierno eterno... nunca te olvides de que un guitarrista siempre te va a amar incondicionalmente.

And if you fall, you know I'll be there for you